Camba rescató un empate en su visita a Devoto

Cuando no se puede ganar, lo mejor es aferrarse al empate. Y así fue. Defensores de Cambaceres, que sigue sin poder acomodarse en este campeonato, cosechó ayer un valioso punto en su visita a General Lamadrid, a pesar de no haber jugado un buen partido.

Si bien el encuentro en sí fue una verdadera obra de terror, el empate lo deja más que conforme, sobre todo, por cómo se dieron las acciones.

Tanto Lamadrid como Cambaceres ofrecieron un espectáculo para olvidar rápidamente. Las imprecisiones y las escasas situaciones de peligro sobre los arcos fueron una constante.

Sin embargo, en el primer tiempo, el conjunto de Devoto fue el que insinuó algo más que Camba, pero sus intentos terminaron en las manos de Lacerre. El Rojo, en tanto, tuvo mucha entrega y voluntad, pero a la hora de hilvanar jugadas de riesgo, falló en su intento.

En el complemento, Cambaceres mejoró levemente su producción. Del medio hacia atrás, el trabajo fue equilibrado porque Lamadrid ya no insistió tanto como lo había hecho en los primeros quince minutos, pero en ofensiva, volvió a carecer de profundidad y sorpresa.

Tanto Massolo como Sebastián Jaime quedaron prácticamente desconectados con los lanzadores, y esto generó que el elenco de Ensenada no fuera punzante. No obstante a ello, defendió con inteligencia cada vez que Lamadrid buscó el arco de enfrente. Así, los minutos fueron pasando y el resultado quedaría inalterable hasta el pitazo final.

Dentro de un encuentro sin emociones y muy mal jugado, Cambaceres pudo celebrar un empate que es importante para sumar. Nada más que eso.