La salud de Pelusa: para el Municipio la elefanta está “mejor que hace un año”

Eje de un intenso debate del que participan proteccionistas de animales, especialistas, funcionarios municipales, concejales de distintos bloques, el Defensor del Pueblo de la Provincia y los visitantes del Zoo local, la salud de la elefanta Pelusa se ha convertido en una cuestión de estado para la Ciudad.

Y mientras en distintos ámbitos crece la preocupación por el bienestar del animal que creció con los platenses, en el Municipio salieron al cruce de lo que consideraron “versiones falsas” y subrayaron que “la salud de Pelusa es mejor que un año atrás”.

El diagnóstico oficial trascendió ayer a través de un comunicado titulado “La salud de Pelusa no es para hacer política” y publicado en la cuenta de Facebook del intendente Julio Garro. Allí se pronosticó que “según los estudios, proyectamos que continuará evolucionado su calidad de vida aún más en los próximos meses”.

El texto difundido en las redes sociales enfatiza, asimismo, que “es un elefante que vivió 50 años en cautiverio y durante -al menos- cuatro años con una infección” y que, “pese a eso, está mejorando”.

En el Municipio explicaron que desde 2014 Pelusa sufre una infección -pododermatitis crónica- en sus cuatro patas y atribuyeron su delicado estado a “las pésimas condiciones del hábitat donde pasó la mayor parte de su vida”.

“Cuando comenzamos a administrar el Jardín Zoológico, encontramos que el espacio estaba en muy mal estado. Vivía en un recinto con un sustrato –el suelo- lleno de escombros y calcáreo. Esto le generó heridas, que con el tiempo, le provocaron temor a caminar. Así, Pelusa fue perdiendo movilidad, lo que le retrajo la fuerza muscular y le provocó desánimo”, sostuvo el comunicado publicado en la cuenta del intendente.

También se aseguró que tras convocar a especialistas de la Ciudad y de distintos países para trazar un diagnóstico se inició “un tratamiento veterinario para curar esas heridas y diseñamos una dieta especial, maximizando la alimentación con un proceso vitamínico. Además, desarrollamos un programa de estimulación psíquica y motivacional y así logramos que Pelusa empiece a recuperar su físico y fortalecer su estado de ánimo”. Asimismo, aseguran que están trabajando para reacondicionar el recinto.

Así, desde la Comuna salieron a responder a los cuestionamientos lanzados desde distintos sectores por la delgadez de la elefanta.

No obstante, en el Municipio insisten en que el “verdadero deseo es trasladar a Pelusa a un lugar mejor”, por lo que ya iniciaron autorizaciones sanitarias ante el SENASA; las direcciones de Fauna de la Provincia de Buenos Aires y la Nación; y sus pares de Brasil para que autoricen su salida” hacia el santuario en el Mato Grosso.

“No es común trasladar un elefante de un país a otro, por eso lleva tiempo: debemos asegurarnos que el viaje no la ponga en riesgo, que pueda adaptarse al nuevo hábitat y que en su lugar de destino estén las condiciones dadas para recibirlo”, agrega el escrito.