Con indicios de reanudación de las obras en San Ponciano ahora piden enrejar la Basílica

Después de cuatro años de espera, esta semana se retomaron las obras en la Basílica San Ponciano y una de las primeras áreas en las que se trabajará de acuerdo a lo que informaron ayer las fuentes consultadas, será el muro que da a calle 5, donde en 2015 se diagnosticó peligro de derrumbe. Además se informó que se analiza la factibilidad de colocar una reja para preservar las veredas de los autos que habitualmente estacionan en los playones del templo.

El edificio, declarado “Monumento Histórico Arquitectónico y Artístico de la provincia de Buenos Aires”, pertenece a la administración bonaerense por expreso pedido de Dardo Rocha, esa es una de las razones por las que el mantenimiento y la restauración del templo mas antiguo de la ciudad está a cargo del gobierno provincial.

Si bien se avanza en el arreglo de las veredas, se espera que se trabaje en la nave del templo que está parcialmente clausurada y tapiada con maderas desde que se le diagnóstico rajaduras y problemas en los cimientos.

En su momento se planteó la recuperación del templo en tres etapas. La de diagnóstico, para detectar los problemas, uno de los mas graves fue el muro que da a la calle 5 porque se comprobó que cedía y tenía fisuras y grietas en sus portantes. Esa parte se completó.

Además se determinó que había problemas en los cimientos y la ausencia de una viga que pese a figurar en los planos no está construida.

Durante los últimos años una rampa peatonal complicó el paso sobre calle 5 y estuvo en el centro de muchos cuestionamientos porque, según se denunció, tras las chapas que se colocaron a modo de división se guarecieron en varias oportunidades personas que ponían en riesgo la seguridad de terceros. Incluso ayer en ese sector, donde los albañiles dejaron las herramientas y algunos elementos de trabajo, hubo un intento de sustracción de esos objetos.

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“Queremos que refuercen todo ese sector y que saquen el chaperío que hay”, indicaron fuentes del templo de 48 entre 5 y diagonal 80.

La paralización de las obras produjo muchos contratiempos y tanto fieles como la gente que lleva a los chicos al Jardín que está en 5 y 47 pidieron en mas de una oportunidad que se reparara la pasarela metálica.

Además toda una nave interior del templo - la que tiene altares laterales, los confesionarios y la fuente de calefacción - quedó clausurada sin poder usar.

“Las tareas comenzaron el martes pasado, se va a trabajar en principio en la refacción de las veredas de calle 5, 48 y diagonal 80, el apuntalamiento de la pared de ese lateral y el arreglo de las inmediacionesde la fachada”, consignó la fuente consultada.

En tanto se anticipó que la intervención del interior se hará en otra etapa y por el momento la nave que da a calle 5 continuará clausurada.

“Cinco años de una tarea inconclusa es mucho tiempo, se trabajará en la puesta en valor de lo mas deteriorado, pero tampoco se conoce el tiempo que demandará lo que falta”, agregó el vocero que afirmó que las tareas llevarán al menos 6 meses.

Por otra parte se aclaró que esos trabajos no afectarán las actividades de la Basílica y se anunció que la bendición de los ramos que tendrá lugar el próximo domingo se hará a las 11 en la Plaza San Martín. El Vía Crucis del Viernes Santo partirá de la Basílica San Ponciano a las 20 y culminará en la Catedral.

PEDIDO PARA ENREJARLA

Los responsables del templo señalaron ayer que se solicitó que, en el marco de las obras que se llevan adelante, se estudie la colocación de una reja perimetral similar a la que se puso en la Catedral.

De esa manera se evitaría que los exteriores de la iglesia se conviertan en playa de estacionamiento, un mal que deteriora las veredas y que se denuncia desde hace tiempo.

“No debería estacionarse ningún auto salvo los autorizados por la parroquia. Es como pensar que los autos estacionen en los jardines de la Gobernación porque no hay otros espacios”, se indicó.

Se anticipó que en caso de enrejarse la Basílica se dejará un portón central para que puedan ingresar los autos que lleven novias o personas con problemas de movilidad; también se prevén dos portones laterales.

La reja se colocaría sobre calle 5, sobre 48 y sobre Diagonal 80.

La invasión de autos en la Basílica es constante ante la falta de control de los vehículos que suben a la vereda, al menos de lunes a viernes.

Cabe indicar que la última gran intervención se realizó en 1999 y “contempló la recuperación del piso de mosaico veneciano original de la nave central, el rescate de los decorados de paredes y techos a cargo de especialistas graduados de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata, la restauración del altar mayor, el púlpito y el presbiterio; vitrales, bancos y el sistema de iluminación”.

En diciembre de 2000, después de permanecer dos años cerrada por las obras antes mencionadas, reabrió entonces la Basílica San Ponciano, fundada en 1883 y considerada una de las más importantes de la provincia de Buenos Aires.

Los trabajos generales de reparación habían comenzado en marzo de 1998. Las obras costaron 550.000 pesos y fueron financiadas por el Ministerio de Obras Públicas de la provincia.

En una primera etapa, se reacondicionó y recicló el piso de mosaico veneciano, en la nave central, colocado en 1910. Los zócalos, de mármol rosso, fueron pulidos y lustrados hasta la recuperación del brillo original.

Las paredes y el techo, que habían sido decorados, en 1906, por los artistas italianos Colli y Rossi, fueron rescatados por graduados y estudiantes de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata.

Los especialistas también pusieron en valor las imágenes del Vía Crucis, que había sido adquirido en Francia, en 1898. También el camarín de la Virgen de Luján, tallado en madera y de una antigüedad de más de 300 años.

Es el templo más antiguo de La Plata, declarado monumento históríco