Y por un día, fue Mar de La Plata

Los primeros minutos del día de ayer encontraron a los hinchas de Gimnasia saliendo del estadio José María Minella después de haberse quedado festejando largamente el triunfo ante River, luego de una dramática serie de penales. Fue una extensa hora durante la cual nadie quiso moverse de su lugar.

La avenida Peralta Ramos, cercana al escenario, se inundó de Triperos que saltaban y se abrazaban felices sin poder creer lo vivido. Atrás había quedado una jornada verdaderamente agotadora, saliendo temprano desde La Plata, algunos adelantado la salida de su trabajo para poder subirse en el auto de algún amigo.

Ya en tierra marplatense, algunos hicieron un paso por el hotel donde se hospedaban los jugadores albiazules, otros aprovecharon un rato algún sector de playa antes de enfilar para la cancha. Pero no todo quedaría en eso, ya que se vendrían momentos intensos post juego con River.

Fue muy complicado encontrar un lugar para comer algo después del partido. Las diferentes cadenas de comidas rápidas tuvieron colas hasta la vereda, con hinchas que no se sacaban por nada sus camisetas o camperas. Hamburguesas, pizzas, milanesas con fritas, eran los platos que más rápido salían y por el que se inclinaron los comensales vestidos de azul y blanco, que eran grupos de amigos y familias enteras.

Restaurantes donde se supieron mezclar hinchas Triperos con algunos de River, pero fueron amplia mayoría los de azul y blanco, que no querían que la noche se termine por nada.

Bocinazos, algo de pirotecnia que rompía la tranquilidad de la ya madrugada marplatense.

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Autos con banderas flameando por las ventanillas cerca de la zona del Casino, pasaban buscando un nuevo destino para alargar la noche, ya en día jueves.

Mientras tanto, los micros de las filiales, agrupaciones y barriadas salían buscando la ruta para llegar al amanecer a nuestra Ciudad.

Y aquellos que amanecieron en una Mar del Plata soleada, optaron por diferentes opciones. Hubo un grupo que se apostó en la puerta del Hotel Sheraton para esperar la salida de los futbolistas y tratar de conseguir alguna foto o cruzar algunas palabras con los jugadores tras la gran noche con River.

También estuvieron los que se fueron hasta al predio de Aldosivi, en la zona del puerto, donde una parte del grupo comandado por Pedro Troglio llevó adelante una práctica liviana.

Llegando al mediodía, muchos simpatizantes empezaron a preparar lentamente el regreso a nuestra Ciudad y las estaciones de servicio se poblaron otra vez de camisetas y buzos azules y blancos. Otra vez se mezclaron con hinchas de River, pero no pasó de alguna mirada.

Sin dudas, la movilización a Mar del Plata fue la más importante de los hinchas en esta edición de la Copa Argentina, donde antes a la gente le ha tocado viajar a Neuquén, después a Córdoba y luego a Rafaela, sin contar que en el debut de la competencia jugó bastante cerca, en el estadio de Temperley.

Esta semifinal de Copa Argentina revolucionó la tranquilidad de un día normal de mitad de semana en Mardel. Y como tiempo atrás ocurrió, la parcialidad gimnasista volvió a demostrar una vez más su fidelidad y su incondicionalidad, más allá de los resultados o del presente que pueda tener el equipo.

Los hinchas hicieron su parte y los jugadores le dieron la gran alegría que tanto necesitaban, todo en el marco de una noche mágica, que seguro quedará en la memoria de quienes viajaron para hacerle el aguante al Lobo, y también para quien es, a la distancia palpitaron un partido plagado de emociones, que desembocó en un desempate por la vía de los penales.

Una movilización con el sello de una hinchada Tripera que ni bien quedó sellado el pasaje a la final de la Copa Argentina empezó a hacer planes para darle forma a otro viaje, que será a Mendoza, el jueves de la semana que viene, a los fines de ser testigos directos del gran cruce definitivo con Rosario Central, que también accedió a esta instancia, tras un empate que desembocó en los penales con Temperley como equipo rival.

En las primeras horas de la mañana de la víspera ya trascendieron las primeras gestiones de fanáticos poniéndose en contacto con las filiales y agrupaciones del club para asegurarse un lugar en los micros que serán fletados, así como también hubo consultas con agencias de viajes para realizar consultas de viajes por vía aérea.

Obviamente que a lo largo del día también fue posible conocer planes de traslados familiares o de amigos que tienen pensado trasladarse en vehículos particulares.