Excepción a la regla: a Xipolitakis su hijo no le trajo un pan sino un divorcio bajo el brazo

A pocos días de haber sido madre, y después de protagonizar un confuso episodio con su marido que terminó con la mediación de la Policía, Viky Xipolitakis analiza por estas horas divorciarse de Javier Naselli, el empresario multimillonario con el que se casó en febrero pasado.

No son días fáciles para la Griega. Movilizada por el reciente parto, la rubia vivió un altercado familiar días atrás en el que, encerrada en una de las habitaciones del lujosos departamento del coqueto barrio de Belgrano que ocupa cuando está en Argentina, terminó pidiendo auxilio al 911 para que saquen a su pareja de su casa, acusándolo de estar “loco” y “demente”.

A pesar de los ecos del episodio, que terminó con Naselli durmiendo en un hotel, al otro día los flamantes padres se mostraron juntos en la primera visita al pediatra, con ella, de extraño bajo perfil, asegurando que “estaba todo bien” aunque su cara decía otra cosa.

Según trascendió, el conflicto familiar se derivó por un maltrato de Naselli a Xipolitakis a raíz de un atraso por una cena no servida. Al parecer, el hombre quería comer pero Viky estaba amamantando a la criatura, algo que él no habría tolerado y que habría demostrado a fuerza de gritos e insultos.

A pesar de que Viky no detalló lo ocurrido, sí se dedicó en las últimas horas a jugar con la indirectas.

Días atrás celebró su cumpleaños, bajo la temática de amor, según ella misma pidió, y fiel a su estilo subió las fotos de la velada en su cuenta de Instagram aunque en ninguna de la gran cantidad de postales y videos se veía a Naselli, quien, según trascendió estaba en el festejo.

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Lo mismo ocurrió para Navidad: La Griega sólo posó y escribió mensajes para Salvador Uriel, a quien ayer, en la portada de un semanario, le dedica una fuerte declaración de amor: “El único que me manda en mi vida es mi hijo”.

El fin de semana trascendió que Xipolitakis, casada en Estados Unidos, estaba averiguando las cuestiones legales de un posible divorcio. Y ayer esta versión tomó aún más fuerza, sobre todo por sus picantes declaraciones, entre las que dejó en claro que todavía no sabe si volverá a Nueva York, en donde su marido reside.

La ex vedette aprovechó la oportunidad de la entrevista para mostrar la carita de su bebé por primera vez en público. “¡Les presento a mi hijo! Con ustedes el amor de mi vida: Salvador Uriel”, escribió ayer junto a una foto de la portada, agradeciendo a la publicación por estar.