Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Policiales |A metros de donde actuaba otra organización desbaratada en 2017

Familiares, dueños de la calle y narcos: cayeron con más de mil dosis de droga

En un operativo realizado en la zona de La Palmera, San Carlos, fueron detenidos 6 hombres y una mujer, en su mayoría parientes, a quienes se acusa de vender cocaína y marihuana en tres búnkers que fueron derribados

4 de Abril de 2019 | 02:02
Edición impresa

“Se llevaron a siete. Quedan siete mil”. No se equivocó el vecino en el resumen del día en el barrio La Palmera, mientras observaba a una topadora voltear dos casas de material construidas sobre la calle 36 bis, entre 150 y 151. De día y de noche, de lunes a lunes, en esas viviendas y en una tercera que cedería tras el embate de la topadora, se vendía cocaína y marihuana al menudeo bajo la mirada de un mini ejército de entre 20 y 30 soldaditos de adolescentes y jóvenes, en casos con un arma en la cintura.

Los vecinos, todas familias humildes que, en casos, consiguieron el lote para construir su casa en el mercado negro de la tierra, conviven con los tiros, los gritos y la droga desde hace varios años.

A 150 metros del operativo realizado entre la tarde del domingo y la madrugada del lunes, a principios de noviembre de 2017 cayó “la banda del drone”, que se protegía de policías y narcos de la competencia con soldaditos y con el dispositivo capaz de tomar imágenes de video en altura.

Aquella vez cayeron varias personas de nacionalidad paraguaya. También esta vez. El equipo comandado por el jefe de la seccional, Juan Navatta, logró detener a seis hombres, todos de nacionalidad paraguaya, de 20, 27, 29, 30, 32 y 55 años. También fue arrestada una mujer, argentina, de 50 años.

Uno de los jefes policiales a cargo de la pesquisa en esta causa, reconoció que el narco menudeo en la zona es resistente al avance de la ley. “Cuando cayó la banda del drone, es probable que estos que detuvimos hoy hayan visto un terreno fértil para crecer.

El investigador confirmó la observación del vecino. Según calculaba mirando a su alrededor, algunos de los ojos que seguían el espectáculo desde las veredas finas, esquivando zanjas con agua podrida o desde techos lejanos, probablemente deban dar alguna explicación en los próximos meses.

¿Por qué no ahora? “Empezamos a investigar en enero y tenemos mucho material. Son siete detenidos y tres prófugos, pero hay muchas más personas a identificar, comprometidas en las pruebas que reunimos. Decidimos cortar acá, detener y comenzar con una nueva denuncia mañana mismo”, prometió el Policía. A la vez, el barrio será dotado de vigilancia permanente con patrullaje policial, se indicó.

La zona estaba en la mira de la delegación especializada en tráfico de drogas, que hace un año inició investigaciones y solicitó allanamientos en viviendas de la zona a la fiscalía a cargo de Ana Medina (UFI Nº 1), que cuenta con una ayudantía especializada en drogas, a cargo de Marcos Vogliolo.

Algunos vecinos que hablaron con este diario mientras avanzaba la topadora calculaban que la banda llevaba cerca de diez años en la cuadra.

“Vine en 2010 al barrio y ya estaban”, dijo entre dientes una vecina, esquivando antenas paradas en la cuadra y paredes que escuchan. La mujer recibió a este diario en su casa, y hablaba bajito.

Con la misma desconfianza entró a la subcomisaría de La Unión el comisario Juan Navatta, que llegó en diciembre pasado y en semanas cambió al personal. Al menos el jerárquico. Así buscó proteger a la pesquisa que inició en enero de versiones de infiltración narco en la seccional que ayer reproducían algunos vecinos con quienes habló este diario.

Esas dos viviendas funcionaron como un centro de aprovisionamiento de cocaína y marihuana que nunca cerraba. Siempre había baguyos o bolsitas. La subcomisaría de La Unión sacó fotos, obtuvo testimonios y grabó videos dedicados a probar que al menos 10 personas sostenían el negocio en esas dos casas construidas hace diez años sobre la calzada y en una tercera vivienda, con paredes y techos de chapa, a unos 20 metros.

El operativo, del que participó la Policía Local, dejó como saldo el secuestro de 546 dosis de marihuana, 840 de cocaína, 600 gramos de sustancias de corte (usadas para estirar la cocaína) y alrededor de 23 mil pesos. Según los investigadores de La Unión, al grupo de detenidos ayer los une más que la nacionalidad: “son todos familiares. El hombre mayor es el padre de varios hermanos y hay otros parientes más lejanos. Están repartidos en dos grupos narco, pero cada uno hace su negocio. Eso sí, cuando tienen que lastimar a alguien se unen. Son todos uno”, le dijo a este diario un vecino de La Palmera, que ayer miraba con entusiasmo la actividad policial.

OTRA VEZ A CABALLO

La “familia” cayó en la cortada de 36 bis, la zona núcleo de las actividades narco investigadas en los últimos meses, que estarían repartidas entre dos unidades de negocio de la misma familia.

Para llegar al fondo de la cortada recurrieron a un ardid conocido últimamente. Como ocurrió el mes pasado en un operativo en Melchor Romero, el comisario Navatta consiguió un camión con caja térmica (como las usadas para llevar fiambres) y escondió adentro a varias decenas de efectivos.

El vehículo estacionó a media tarde, en el punto cero de la banda y saltaron a la calle los policías. Sorprendieron a vecinos tomando aire, soldaditos que cuidaban los kioscos de venta de droga y mandos medios de la organización cuyos nombres estaban escritos en la lista de detenciones.

La estrategia del “Caballo de Troya” permitió desarrollar siete allanamientos en la misma cuadra. Todo quedó en silencio hasta la madrugada, cuando hubo un ataque a los policías que habían sido colocados como consigna, custodiando las viviendas ya deshabitadas. Un efectivo recibió una pedrada en un brazo y por la agresión fue detenido un hombre.

“Nosotros sabemos que hay mucha más gente involucrada en esto. Hay quienes forman parte de esta familia y de la comunidad paraguaya en la zona, pero no son los únicos. Hay argentinos que actúan como punteros y proveedores”, indicó el jefe policial.

Medio millón en droga

Según estiman los investigadores, la droga que se vendía en los kioscos derribados ayer llegaba desde capital federal.

En esas casas se estiraba y se vendía en dosis para consumo personal a razón de 300 pesos la marihuana y 500 la cocaína. En total, la góndola tenía un poco más de 580 mil pesos.

 

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

Multimedia

Según la policía, la droga llegaba desde buenos aires y la banda de la localidad de san Carlos la fraccionaba en dosis de uso personal / el dia

Tres viviendas fueron objetivo de la topadora, en 36 bis entre 150 y 151, una calle que quedó cortada por dos de los búnkers levantados en plena calzada / Roberto Acosta

+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2250

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3450

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2250.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla