Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar

Un trastorno difícil de detectar

Un trastorno difícil de detectar

PEDRO RAFAEL GARGOLOFF (*)

2 de Junio de 2019 | 02:05
Edición impresa

Un primer problema es que la sospecha de la presencia del trastorno pedófilo -un trastorno mental- es considerablemente difícil y, más aún, la posibilidad de su detección por el común de la sociedad. Esto se debe a que, por el reconocimiento de su naturaleza delictiva, constituye una conducta extremadamente oculta y reservada, muy precavida y meticulosa para evitar el riesgo de su exposición pública, tanto que el pedófilo la torna invisible hasta para sus seres más íntimos.

El Manual de diagnóstico DSM 5 describe al pedófilo como una persona adulta con recurrentes fantasías, impulsos o conductas sexualmente excitantes e intensas con niños que además ha actuado según esos impulsos o está muy angustiado por tener esas fantasías e impulsos.

Suelen ser hombres, con mayor frecuencia de 30 a 50 años, generalmente casados, algunos con antecedentes de haber sido abusados y sin presentar un perfil definido en cuanto a inclinación sexual. Se manifiestan por un abanico de conductas anormales, que van desde la simple observación a las más infrecuentes conductas sexuales explícitas de abuso físico genital. Compartir imágenes y videos por redes ocultas de internet, usufructuando su potencial anonimato, es otra de las frecuentes derivaciones.

Las víctimas no suelen percibir el abuso, por lo extremadamente cauteloso del comportamiento de los pedófilos, aunque en otros casos éstos también logran sus propósitos mediante complejas manipulaciones, que van de sutiles a muy violentas. Un dato no menor es que son frecuentes las reincidencias.

Si bien son plenamente conscientes de estar cometiendo un delito, al ser descubiertos se justifican argumentando la ausencia de daño directo real para la víctima, presentándo la suya como una conducta natural e inofensiva por la actividad que desempeñan con niños/adolescentes (profesional sanitario, docente, religioso), excusándose incluso en la ausencia de intención de dañar al tercero.

Sin dudas que es un trastorno mental que obliga al estado y a la sociedad a intervenir mediante programas o campañas centradas en la prevención, en un marco de educación colaborativo entre padres, docentes, médicos pediatras y profesionales de la salud mental especializados en niños y adolescentes.

 

(*) Psiquiatra, miembro de la Red Educacional de la Asociación Mundial de Psiquiatría

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE a esta promo especial
+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Full Promocional mensual

$650/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6100

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme

Básico Promocional mensual

$500/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3950

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme
Ver todos los planes Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional mensual
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$500.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $3950.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla