En el Día de los Humedales, piden proteger los que están bajo amenaza en la Región

Fábricas de vida para el planeta y “esponjas naturales” capaces de equilibrar los fenómenos meteorológicos extremos, los humedales están disminuyendo en la mayoría de las regiones del mundo a pesar de ser clave para la supervivencia humana. También en nuestra región están bajo amenaza. Por eso, al conmemorarse hoy el Día Internacional de los Humedales, distintas organizaciones volvieron a destacar la importancia de este recurso natural y a reclamar que se los proteja.

Los humedales son áreas que permanecen en condiciones de inundación o, por lo menos, con su suelo cubierto por agua (de origen fluvial, marino, pluvial o subterráneo) durante periodos de tiempo considerables que amortiguan las inundaciones y las sequías, actuando como esponjas y reservorios. En la Región hay humedales en los montes ribereños del delta del Río Santiago; en la selva marginal Punta Lara; en la laguna Los Patos; en el Parque Ecológico Municipal de La Plata y en sectores del arroyo el Pescado, entre otros puntos.

No obstante su importancia, los ecologistas advierten que están bajo serio riesgo. Por eso, desde la ONG Nuevo Ambiente plantearon que la fecha “debe servir para aumentar la sensibilización del público en general acerca de los valores de los humedales y los beneficios que reportan, pero también para exigir del Estado la dotación de elementos que colaboren con la preservación de los mismos”.

Sucede que estos ecosistemas vitales para mitigar la crisis climática aún no cuentan con una Ley que los proteja. “Seguimos exhortando al Congreso Nacional a dar sanción definitiva a una ley de protección de esos ecosistemas”.

Marcelo Garófalo, titular de Nuevo Ambiente, consideró, además, que “se debería trabajar en una propuesta de un proyecto de ley para Buenos Aires”. Según explicó, tendría que tener por objeto establecer los presupuestos para la recuperación, conservación, monitoreo, control, uso sustentable, adaptación al cambio climático, y revalorización como mitigadores naturales de inundaciones, de los humedales existentes.

Garófalo remarcó que “en nuestra región Capital poseemos grandes expansiones de humedales, que necesariamente deben ser objeto de protección” y expresó particularmente su reclamo para que “se determine la línea de ribera del Arroyo El Pescado, pues es lo que fija el alcance de las restricciones. También necesitamos que exista un plan de manejo sobre el territorio que defina qué se puede hacer en el lugar y las prohibiciones”.

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En la ONG ambientalista recibieron distintos reclamos vecinales “sobre posibles construcciones en la zona que necesariamente deben esclarecerse”.

riesgo para la biodiversidad

Ya hay un millón de especies en peligro de extinción por la acción del hombre. “Si a esto le sumamos la destrucción de los humedales vamos a estar en serios problemas. El hombre siempre ha querido reemplazar a la naturaleza, pero fueron intentos fallidos”, advierte Horacio de Beláustegui, de la Fundación Biosfera. Y agrega: “Hay algo importante y es el concepto de que el hombre no debe ser el centro de todo. Debemos tomar a la biodiversidad como parte de esa red trófica. No ser rey de los ecosistemas. Y cuidarlos. La visión economicista hace destruir ecosistemas magníficos con fines de agricultura, ganadería, deforestación o la construcción de countries”.

El licenciado en Ecología recordó que los humedales “dan servicios a las poblaciones humanas. Beneficios como el agua dulce, los alimentos, los materiales para la construcción, biodiversidad y control de las crecidas. En nuestra región, por ejemplo, tenemos el junco, que es uno de los elementos vegetales que retarda o absorbe la energía cinética del agua en las sudestadas, en la costa del Río (de la Plata). Si no tuviésemos el junco el agua avanzaría inundando grandes áreas”.

Beláustegui y Garófalo coincidieron en rescatar como un hecho positivo el Inventario de Humedales de la Provincia que se publicó el año pasado a instancias del Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS). Pero ambos coincidieron en que todavía queda mucho por hacer. “Hoy, por el cambio climático, está mucho más en riesgo la biodiversidad. Y ya están fallando los humedales que se regulaban naturalmente. Deberíamos tener políticas muy claras para preservarlos. Hay que desarrollar talleres educativos para los chicos, y donde participen también los responsables de cada municipio, para saber la importancia que cada humedal tiene”, destacan desde Biosfera.

“En Argentina el 22 por ciento del territorio estaba originalmente ocupado por humedales, muchos de los cuales se han perdido o están en proceso de degradación por el uso del suelo y la sobreexplotación de recursos naturales”, dijo, por su parte, Marta Andelman, coordinadora de comunicación de Fundación Humedales.

“Los servicios ecosistémicos que brindan son fundamentales para la adaptación al cambio climático -advirtió Andelman- ya que protegen las costas de los fenómenos meteorológicos extremos y constituyen barreras contra la subida del nivel del mar y los impactos de las tormentas”. En ese sentido, destacó que según la Convención Internacional de Ramsar a la que Argentina adhiere y cuyo objetivo es la conservación y uso racional de humedales, desde 1970 se perdió el 35 por ciento de los humedales de todo el planeta, a una velocidad que supera tres veces la pérdida de bosques”.

Y en Argentina las grandes amenazas son su transformación para el uso de distintas actividades productivas y emprendimientos como desarrollo de infraestructura.

“Se drenan los humedales, se rellenan para elevar el terreno y construir mega urbanizaciones como countries y barrios náuticos como los de Escobar, Tigre y la cuenca del río Luján, que provocan inundaciones en áreas aledañas con los impactos sociales, ambientales y económicos que eso implica”, dijo la bióloga.

ACTIVIDAD EN BERISSO

En este marco, hoy el Museo Ornitológico y Centro de Interpretación Ambiental (MOCIA) de Berisso, realizará una caminata por las orillas del Canal Génova. La cita, coordinada por Julio Milat, será hoy a las 17.30 en el puente 3 de Abril, de Montevideo y Génova.