En Estados Unidos, muy buena reacción de los mercados: Musk, otro gran ganador

El dólar se disparó, las bolsas estadounidenses subieron y el bitcoin alcanzó un récord ayer, después de la victoria del republicano Donald Trump en las presidenciales de EE UU.

"Hasta ahora, los mercados siguen el mismo escenario que en la victoria de Trump en 2016: las acciones suben mientras que los bonos del Tesoro estadounidense a largo plazo se venden en previsión de la expansión fiscal", apuntó Gordon Shannon, gestor de carteras en TwentyFour Asset Management.

La atención de los mercados debería "centrarse en las consecuencias inflacionarias de los aranceles y la reducción de la inmigración", añadió. 

El dólar subió frente a la mayoría de las demás divisas. Frente al euro, llegó a dispararse brevemente más de un 2%, un cambio especialmente significativo para el mercado de divisas.

Wall Street abrió en fuerte alza tras la victoria de Trump.

Asimismo, la elección del candidato republicano impulsó varios activos, como las acciones del grupo Tesla, que subieron un 12,97%, impulsadas por el apoyo de su dueño Elon Musk a Trump.

Es bueno recordar que Musk, el hombre más rico del mundo, fue el partidario más influyente de Trump en su campaña de regreso a la Casa Blanca.

Musk creó un comité de acción política en EE UU, conocido como Super PAC, en julio pasado, con el objetivo de apoyar a Trump y al movimiento "Make America Great Again" (MAGA).

El Super PAC, que recabó contribuciones para actividades relacionadas con las elecciones, recibió unos 75 millones de dólares de Musk solo en los meses de agosto, septiembre y octubre.

Forbes estima el patrimonio neto de Musk en 264.000 millones de dólares.

El "America PAC" se convirtió en una de las mayores organizaciones pro-Trump. Puso en marcha polémicas iniciativas, como ofrecer incentivos económicos a votantes que atrajeron a otros para apoyar un pedido de apoyo a la primera y segunda Enmienda de la Constitución de EE UU, que protegen la libertad de expresión y el derecho a portar armas.

También lanzó una lotería diaria de un millón de dólares para personas que se registraran para votar en los estados indecisos.

BAJAR AL BARRO

A diferencia de la mayoría de los multimillonarios, que permanecen en la sombra, Musk se convirtió en la celebridad más destacada en su respaldo a Trump, con frecuentes apariciones en su campaña.

Su primera aparición con Trump fue el 5 de octubre en Butler (Pensilvania), en el mismo lugar donde el republicano fue víctima de un intento de asesinato en julio.

Durante el mitin, Musk pronunció un apasionado discurso en el que advirtió que "estas serían las últimas elecciones" sí Trump no ganaba, afirmando que los demócratas se harían con el control del país.

Trump prometió nombrar al multimillonario dueño de Tesla director de un nuevo "departamento de eficiencia gubernamental", o DOGE, que comparte nombre con la criptodivisa vinculada a Musk.

Este nombramiento plantearía importantes conflictos de interés, dado el papel esencial de SpaceX en las misiones de la NASA y la dependencia de Tesla de los reguladores gubernamentales, en particular para la tecnología de los autos sin conductor.

Además, el sistema Starlink de SpaceX desempeña un papel fundamental en el apoyo a las comunicaciones en zonas de guerra y catástrofes de todo el mundo.

Según el New York Times, SpaceX y Tesla han recibido al menos 15.000 millones de dólares en contratos gubernamentales en la última década.

Desde la red social X (que compró hace dos años cuando aún se llamaba Twitter y a la que cambió el nombre), Musk utilizó su cuenta con más de 200 millones de seguidores para promover la plataforma de Trump, en particular en temas como la inmigración y las cuestiones transgénero.

También difundió teorías conspirativas desacreditadas sobre máquinas de votación amañadas.

Según el Center for Countering Digital Hate, las afirmaciones electorales falsas o engañosas de Musk en X acumularon casi 1.200 millones de visitas en solo unos meses.

Lo cierto es que ayer, la empresa Tesla tuvo ganancias exorbitantes en Wall Street, mientras que las acciones de empresas de energía solar cayeron, y el valor del litio se mantuvo sin cambios tras perder 55% en un año.

Trump ganó las elecciones, y Musk es socio de ese triunfo.