Para Macri, el acuerdo con el FMI y el Presupuesto “traerán tranquilidad”

El presidente Mauricio Macri, dijo ayer que el acuerdo que se negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI), para acelerar el cobro de partidas del crédito aprobado en junio, y la aprobación de un presupuesto nacional “más sano y confiable” pondrán de nuevo la economía en marcha.

“Hoy en Argentina hay un Gobierno que intenta decirles siempre la verdad, trabajar con transparencia, sinceridad y en equipo y sabiendo que si resolvemos esto va a ser un cambio fundamental, dejar atrás 70 años de frustraciones y crisis recurrentes”, afirmó el presidente en una rueda de prensa en la provincia de Mendoza.

A pesar de que el mandatario lamentó que estos últimos meses, marcados por la brusca devaluación del peso, han significado “un golpe grande” en la economía tras haber logrado hasta el primer trimestre del año tener más crecimiento e inversión, señaló que el acuerdo en tratativas con el FMI y las negociaciones a nivel político por aprobar un presupuesto “más sano y confiable” pondrán la economía “en marcha de vuelta”.

“Nos va a permitir dar tranquilidad sobre la demanda financiera de Argentina del año que viene y eso va lentamente a permitir que se recupere el crédito para el sector privado y recuperar y poner en marcha de vuelta la inversión y la economía del país”, agregó.

Desde el pasado lunes, un equipo del Gobierno renegocia en Washington con la cúpula del FMI las condiciones del acuerdo firmado en junio pasado, por el que el organismo otorgaba un crédito de 50.000 millones de dólares.

El objetivo principal es acelerar el cobro de más partidas de ese préstamo (hasta ahora llegaron 15.000 millones) para hacer frente a las necesidades fiscales y al agravamiento de la devaluación.

LE PUEDE INTERESAR

El dólar bajó por tercer día consecutivo y cerró en la franja minorista a $38,71

LE PUEDE INTERESAR

“Los mercados se encaminan a una mayor tranquilidad”

Macri agradeció a los dirigentes de la oposición que “han colaborado y tenido actitud responsable” en este momento, mientras se consensúa el Presupuesto -que deberá pasar por el Congreso- independientemente de su pertenencia política, así como el enorme aporte del empresariado exportador.

“Creo que podemos ser los responsables de que esta realmente sea la última crisis, pero tenemos que trabajar en conjunto poniendo los problema sobre la mesa y poner soluciones”, opinó Macri, que estuvo acompañado del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el gobernador provincial de Mendoza, Alfredo Cornejo, presidente de la Unión Cívica Radical, que integra el oficialista Cambiemos.

Sobre los tres días que lleva el peso mejorando su valor respecto del dólar -tras días de fuerte devaluación que agravó la incertidumbre económica-, Macri dijo que hay que tener “cuidado”.

“No porque hayamos tenido tres días consecutivos de calma en los mercados significa que las cosas estructurales que tiene Argentina se hayan resuelto”, aseveró.

“Hemos avanzado como argentinos en una mayoría decir que no podemos vivir más de prestado, porque gastamos más de lo que tenemos y eso condena que muchos argentinos no puedan desarrollarse”, destacó, en referencia al objetivo principal del Gobierno de achicar el déficit fiscal, que asegura es un problema que se arrastra desde hace siete décadas-, para dejar de depender de la financiación exterior.

A su juicio, un Estado que gasta más de lo que tiene genera inflación y esto “es lo que más castiga a los argentinos”.

“No podemos vivir más de prestado ni gastar más de lo que tenemos. Eso genera inflación y es lo que más castiga a los argentinos. Ya tuvimos que atravesar seis tormentas consecutivas en los últimos nueve meses. Ahora estamos decididos a resolver los problemas para que sea la última crisis”, dijo el jefe de Estado,

Consultado por cuál es el tipo de cambio que el Ejecutivo considera idóneo -hoy un dólar cuesta 37,5 pesos, pero llegó a rozar los 40 la semana pasada-, el mandatario dijo que el actual es “sumamente competitivo”.

“Nadie ha fijado cuál es el rango. Es del orden de donde estamos hoy, pero no nos atemos a números”, consideró, y reiteró que “claramente”, la devaluación también genera mayor inflación, un indicador que acumula un 19,6 % hasta julio y un 31,2 % interanual.

“Estamos frente a ese proceso, pero somos optimistas que estabilizando las cosas la inflación va a bajar nuevamente”, subrayó, mostrando el compromiso de que “con un año de retraso”, se irá a una inflación de un dígito.

Macri llegó a las 11.45 a la bodega Bressia en Agrelo, Luján de Cuyo. Estuvo reunido con 60 productores y bodegueros del sector vitivinícola. Entre los temas que discutieron estuvieron las retenciones y la suba de los costos internos. Es que hay preocupación por la inflación y el peso de las tarifas de luz, agua y gas, dijo Eduardo Córdoba, del Centro de Viñateros.

En tanto, Juliana Awada se quedó en el Gran Hotel Potrerillos, frente al lago y entre un viñedo, en plena cordillera, que es donde pasaron la noche.

Con Macri está Alfredo Cornejo, gobernador mendocino y aliado de Cambiemos, y los ministros Rogelio Frigerio y Guillermo Dietrich, más el secretario de Agroindustria, Luis Etchevehere. También estuvo el presidente del Banco Central, Luis Caputo.