Rechazo a la ley, con un fuerte operativo policial

De un lado, integrantes de organizaciones sociales, piqueteras y de izquierda manifestando su rechazo a la Ley Bases y el paquete fiscal que la Cámara de Diputados empezó a debatir ayer. Del otro, un fuerte operativo policial dispuesto a aplicar el protocolo antipiquete ordenado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Con ese clima de tensión amanecieron ayer las inmediaciones del Congreso de la Nación, en pleno centro de la ciudad de Buenos Aires.

“Traidores a la Patria” y “La casta son los jubilados” fueron algunas de las consignas que pudieron leerse en las pancartas que, además, incluían los rostros de los legisladores de La Libertad Avanza, la Unión Cívica Radical, del PRO y del bloque Hacemos Coalición Federal que anticiparon su respaldo al paquete de reformas que impulsa el presidente, Javier Milei.

Hasta la Plaza de los Dos Congresos se movilizaron referentes del Frente de Lucha Piquetero, que encabeza el Polo Obrero junto a otras agrupaciones. Por separado, protestaron miembros de la CGT, las dos CTA, de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular y de ATE, entre otras organizaciones.

“Esta ley viene a profundizar la quita de derechos de las y los trabajadores en su conjunto, atenta contra la soberanía nacional y la defensa de nuestros recursos naturales”, apuntó un manifestante.

“Exigimos a la CGT y la CTA la convocatoria a un paro general activo de inmediato, con una masiva movilización a rodear el Congreso, frente al tratamiento de la Ley, y la puesta en pie de un plan de lucha nacional sistemático hasta derrotar el plan global de ataque a todo el pueblo por parte del gobierno de Milei, rechazando el conjunto de la ley y cualquier tipo de reforma laboral y por la anulación del mega-DNU y el protocolo de Bullrich”, reclamaron, en tanto, desde el Polo Obrero.

Fue curioso observar que algunos manifestantes llevaban el rostro cubierto con máscaras antigas, acaso previendo un escenario conflictivo con las fuerzas de seguridad.

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En este escenario, la ministra Bullrich anticipó que aplicará el protocolo antipiquetes de ser necesario ante un corte de calles.

Atento al desenvolvimiento de la marcha, desde temprano una nutrida delegación de camionetas con agentes de la Gendarmería nacional se apostó sobre uno de los carriles de la avenida Rivadavia, en las inmediaciones del Parlamento, que lució completamente vallado.

También pudo verse a numerosos miembros de la Prefectura Naval y de la Policía Federal que buscaron evitar que se interrumpiera el tránsito sobre las principales arterias en la zona del Congreso. De hecho, tras el intento de algunas organizaciones de izquierda de cortar la avenida Rivadavia, alrededor de las 17 se apostó un cordón policial en la intersección con Entre Ríos para garantizar la circulación. La escena se repitió durante el transcurso de la jornada.